CHUPITOS DE VITRIOLO

Apocalypse now

El invierno no acaba de marcharse y aquí hace un frío que pela. Con lo poco que me gusta a mi este tiempo. A las 8 de la mañana ha empezado a llover y sigue igual. Si ya lo dice el refrán: Hasta el 40 de Mayo no te quites el sayo. Si hoy es 14 de Junio, quedan 5 días de desequilibrio meteorológico.
Ya estoy bronceada y he podido disfrutar de los placeres veraniegos durante las últimas semanas, tendré que meter mano en el trastero y sacar el forro polar y los calcetines de cuello vuelto.
Iba yo toda puesta, andando por la calle, cuando he tenido que cruzar salvajemente. He corrido hasta llegar a un riachuelo que se había formado por la lluvia y detrás de este, un charco tamaño piscina olímpica. Tremendo. He saltado, ilusa de mi, creyendo que lograría esquivar el obstáculo...todos mis esfuerzos han sido en vano. No solo no lo he conseguido, sinó que he caído justo en el centro del susodicho, mojándome hasta las rodillas, mojando, también, a una chica que esperaba el autobús cerca mío. Espectacular.
A este paso podré presentarme a las próximas olimpiadas como saltadora de charcos con tirabuzón.
Quizá el Diluvio Universal ocurrió de verdad, ¿no?. Ya me veo en plan Noé, con mi arca particular y los apestosos bichejos a mi alrededor.
Algunas veces, la realidad supera la ficción.